Ese día tampoco comeríamos, el suboficial Valdivia embutiendo a mis camaradas los destinos dentro del destartalado bus, porque me reclute pensaba oculto atrás donde nadie me veía, con mi mochila listo a punto de escaparme ser un desertor antes de nada. Esto en era en la ex terminal de Sta. Cruz, y ellos se iban rumbo al regimiento I Abaroa de caballería al sureste de Bolivia, en la región Chaqueña de Camiri.
¿No sé qué paso? tal vez el fue el cumulo de tonterías que acostumbraba hacer, solo podre atribuiré que fue el destino la emoción del momento a lo mejor… fue la idea de hacer alguna vez lo correcto en mi vida, consciencia
y cambie de rumbo me embutí entre mis camaradas…rumbo a Camiri.
De esa manera no se realizo el plan b como yo nunca llegue al paraje tropical de palmeras, mujeres hermosas y ríos amazónicos, me decía mi hermano haber en el oriente boliviano… en su lugar encontré el chaco de monte ceñido, de bellas chicas y ríos que llevan deliciosos pescados ñam ñam lugar de caballos, vino, violín y bombo con mucha alegría (Continuara…)